En alguna ocasión hemos comentado que es tristemente frecuente que las piezas lleguen a nosotros con algunos desperfectos. Con un poco de habilidad podemos lograr reparaciones aceptables y así devolver a las figuras un lugar entre sus compañeras.
Estas tres, por ejemplo, llegaron con diferentes niveles de daño.
La pieza de Bruver, casa menor dentro del panorama español pero de series muy interesantes, como esta de la marina de guerra en acción, llegó sin lepanto y con la bayoneta perdida.
El bonito cruzado de Reamsa solo habia perdido la peana, ha sido fácil ponerle una de DSG de plástico de repuesto.
El corneta de la preciosa serie de caballería de Pech estaba en peor estado. Había perdido la corneta y le faltaba la mano. La reconstrucción de la corneta con plastilina fue laboriosa pero no ha quedado mal y encontrar otra mano, esta vez con revolver, fue un poco mas difícil pero al final se consiguió.